Con la llegada de la PlayStation 5 Slim y Pro, Sony no solo busca renovar su consola insignia con diseños más compactos y potentes, sino también rendir homenaje a una trayectoria marcada por algunos de los videojuegos más icónicos de la industria. Desde el lanzamiento de la primera PlayStation en 1994, la marca japonesa ha conquistado a millones de jugadores en todo el mundo con títulos que marcaron generaciones como Crash Bandicoot, Metal Gear Solid y Final Fantasy VII. A lo largo de los años, la evolución ha sido constante: la PlayStation 2 introdujo clásicos como Shadow of the Colossus y God of War, mientras que la PlayStation 3 consolidó sagas como Uncharted y The Last of Us. Con la PS4, Sony dio un salto gráfico y narrativo que llevó a éxitos globales como Bloodborne, Horizon Zero Dawn y Marvel’s Spider-Man, reforzando su posición como líder en experiencias inmersivas. Ahora, con la PS5 Slim y Pro, la compañía apuesta por un hardware mejorado capaz de aprovechar al máximo las nuevas entregas de estas franquicias que hicieron historia.
Desde clásicos inolvidables hasta los exclusivos más recientes, la consola de Sony celebra su legado con nuevas versiones potentes y elegantes
La historia de Sony y sus consolas no puede entenderse sin sus juegos exclusivos, aquellos que definieron la identidad de la marca frente a la competencia. Títulos como Gran Turismo, la saga Ratchet & Clank, Ghost of Tsushima y la reciente entrega de God of War Ragnarök han dejado huella en millones de usuarios. La PS5 Slim, más ligera y accesible, busca llevar estas experiencias a un público más amplio, mientras que la PS5 Pro apunta a los jugadores que buscan el máximo rendimiento gráfico con soporte para 8K, ray tracing avanzado y tiempos de carga casi inexistentes. Este lanzamiento refuerza la importancia del catálogo como motor de la marca, pues sin la grandeza de sus juegos, PlayStation no tendría la relevancia que mantiene en la industria. Con estas nuevas versiones, Sony no solo mira al futuro del gaming, sino que celebra con orgullo un legado que ya forma parte de la historia cultural moderna.