Nike ha intensificado su estrategia de venta directa al consumidor (D2C), cerrando tiendas físicas minoristas y expandiendo su presencia en plataformas digitales. Esta transformación ha permitido a la marca controlar mejor la experiencia del cliente, aumentar márgenes de ganancia y recopilar datos valiosos para personalizar ofertas.
Tecnología, datos y experiencia directa al consumidor
Una de las claves ha sido Nike Training Club y SNKRS, plataformas digitales que permiten entrenamientos guiados, seguimiento del rendimiento físico y acceso exclusivo a lanzamientos limitados. A través de ellas, Nike ha construido una comunidad de usuarios fieles y ha incrementado su margen de ganancia al reducir la dependencia de intermediarios.
En 2023, el 43 % de las ventas totales de la compañía se realizaron a través de canales digitales. Esta estrategia digital no solo aumenta las ventas, sino que permite conocer a los consumidores en profundidad, gracias a los datos recogidos sobre hábitos de compra, entrenamiento y preferencias de diseño.
La compañía también ha invertido en innovación tecnológica en sus productos. Zapatillas como las Nike Alphafly y las Mercurial han sido desarrolladas con el aporte de atletas profesionales y análisis biométrico, lo que posiciona a la marca como referente en alto rendimiento.
A nivel de patrocinio, Nike sigue siendo dominante. Desde LeBron James hasta Kylian Mbappé, pasando por selecciones nacionales y clubes de fútbol, su influencia en el deporte profesional sigue siendo estratégica para su expansión global.
Nike demuestra que en el deporte moderno, la tecnología y la experiencia digital son tan importantes como el producto físico. Su visión de futuro la mantiene a la vanguardia del mercado, marcando tendencia no solo en moda deportiva, sino también en innovación empresarial.