LaLiga ha confirmado que no invertirá el orden del encuentro entre Barcelona y Valencia, descartando también la posibilidad de que se dispute en Mestalla, manteniendo así la programación inicial del calendario. La decisión llega tras la presión de algunos sectores que buscaban modificar la fecha y el lugar del partido por motivos logísticos y de seguridad, especialmente considerando la importancia del encuentro para la clasificación y la expectación de los aficionados. Fuentes de la organización aseguran que cambiar la sede o el horario afectaría la integridad del calendario y podría generar precedentes complicados para futuras fechas. Por su parte, los clubes implicados deberán adaptarse a la planificación oficial, mientras los aficionados esperan con expectación un duelo que promete emociones fuertes, con el Barcelona buscando consolidar su liderazgo y el Valencia intentando sumar puntos vitales en su lucha por la zona europea. LaLiga, en este sentido, ha querido reforzar su autoridad sobre la gestión de partidos, asegurando que las decisiones se toman considerando la equidad deportiva y la logística global del campeonato.
La organización mantiene la programación original del partido pese a solicitudes de modificación
Además, el rechazo a la opción de Mestalla responde a múltiples factores relacionados con la seguridad y la infraestructura, así como la capacidad para recibir a la afición de ambos equipos sin comprometer la experiencia del espectador. LaLiga enfatiza que la planificación de partidos es resultado de un análisis exhaustivo que contempla fechas, horarios, desplazamientos y descansos para los jugadores, y que cualquier cambio podría desestabilizar la organización general del torneo. Por otro lado, los aficionados y medios de comunicación han reaccionado con opiniones divididas: mientras algunos apoyan la decisión por mantener la coherencia del calendario, otros consideran que la flexibilidad podría mejorar la experiencia del público y facilitar la logística de los clubes. No obstante, la postura oficial es clara: el partido se jugará en la fecha y estadio previamente establecidos, reforzando la coherencia y la planificación estratégica de LaLiga para toda la temporada. En resumen, el encuentro entre Barcelona y Valencia se mantiene firme en su programación original, y tanto clubes como seguidores deberán adaptarse a las decisiones de la organización, asegurando que la competición continúe bajo criterios de equidad, seguridad y planificación rigurosa.