En marzo de 2025, París celebró la 32ª edición del Grand Prix de la Baguette, uno de los concursos más prestigiosos del mundo panadero. De entre 187 participantes, el jurado —compuesto por expertos, periodistas y ciudadanos parisinos— eligió como ganadores a Mickaël Reydellet y Florian Bléas, de la boulangerie La Parisienne, ubicada en el distrito 10. Su baguette fue evaluada por criterios como aspecto, sabor, cocción, miga y alveolado, y destacó por su corteza crujiente y equilibrio perfecto entre densidad y suavidad. Como parte del premio, La Parisienne tendrá el honor de abastecer al Palacio del Elíseo durante un año, sirviendo pan al presidente francés y sus invitados.
La boulangerie La Parisienne conquista el Grand Prix con una sinfonía de crujidos y excelencia panadera
Este reconocimiento no es nuevo para Reydellet, quien ya ganó el concurso en 2016 y ahora dirige nueve panaderías entre París y Normandía. Su éxito refleja años de trabajo constante, adaptación a las cosechas de trigo y compromiso con la calidad. La baguette ganadora ha sido descrita como una “sinfonía de crujidos”, superando incluso la prueba sensorial popularizada por la película Ratatouille. El concurso reafirma el valor cultural de la baguette, declarada Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO, y celebra el arte de la panadería como símbolo de identidad francesa.