Kylian Mbappé ya es oficialmente jugador del Real Madrid y ha sido presentado con el icónico dorsal número 10, un número que históricamente ha estado reservado para las grandes figuras del club blanco. Desde que se anunció su fichaje, los rumores sobre qué número portaría el francés llenaron redes sociales y medios deportivos, pero ahora la expectativa ha sido superada: Mbappé no solo llega como el fichaje estrella del año, sino como el nuevo líder del proyecto madridista. El dorsal 10 no es cualquier número; lo han llevado leyendas como Ferenc Puskás, Luis Figo y, más recientemente, Luka Modrić. Con esta camiseta, el delantero campeón del mundo buscará dejar huella en el Santiago Bernabéu, combinando velocidad, técnica y una ambición que ya ha demostrado en sus años con el PSG y la selección francesa.
El astro francés toma el mítico dorsal y promete iniciar una nueva era en el club merengue
La elección del número no es solo simbólica, sino estratégica. El Real Madrid busca potenciar la imagen global del club con una figura que no solo brilla en el campo, sino que también es un fenómeno mediático y comercial. Mbappé, conocido por su potencia goleadora y visión de juego, se une a un equipo lleno de talento joven como Jude Bellingham, Vinícius Jr. y Eduardo Camavinga. Con este movimiento, el Madrid apuesta por construir una plantilla dominante para la próxima década, capaz de competir en todas las competiciones nacionales e internacionales. La presentación de Mbappé con la camiseta número 10 causó furor entre los aficionados, agotando camisetas en las tiendas oficiales y disparando la interacción en redes sociales. Todo apunta a que su llegada marcará un antes y un después en la historia reciente del club. Si las expectativas se cumplen, el francés no solo será el nuevo referente del equipo, sino también un candidato firme al Balón de Oro en los próximos años.