Dallas Jenkins, creador de la aclamada serie The Chosen, rompió el silencio ante las críticas que cuestionan su enfoque particular de la historia de Jesús y sus discípulos. Desde su estreno, la serie ha generado debates sobre la interpretación de ciertos pasajes bíblicos, el dramatismo añadido y la representación de personajes secundarios que no aparecen con tanto detalle en los evangelios tradicionales. Jenkins ha defendido su trabajo argumentando que su objetivo es humanizar la historia, acercando la vida de Jesús y sus enseñanzas a una audiencia contemporánea sin traicionar los principios fundamentales de la fe cristiana. Según el director, la narrativa busca conectar emocionalmente con los espectadores, mostrando conflictos internos, dilemas personales y momentos de vulnerabilidad que los textos históricos no siempre registran. Esta aproximación, dice Jenkins, permite que la historia sea más accesible y relevante, especialmente para aquellos que no están familiarizados con la Biblia o que buscan una experiencia más cinematográfica de la vida de Jesús.
Cómo Dallas Jenkins defendió su visión artística y narrativa frente a cuestionamientos de historiadores y espectadores
A pesar de las críticas, la serie ha logrado consolidarse como una de las producciones religiosas más vistas y comentadas en la actualidad, recibiendo elogios tanto por la calidad de la producción como por las actuaciones de su elenco. Jenkins asegura que cada decisión creativa, desde el guion hasta la dirección de actores, ha sido cuidadosamente meditada para equilibrar fidelidad histórica y libertad artística, creando una obra que respete la esencia de la historia pero que también tenga impacto emocional. Además, el creador enfatiza que la crítica constructiva es bienvenida, pero que su visión no cambiará por presiones externas, ya que considera que la misión de The Chosen es inspirar, educar y fomentar la reflexión sobre la figura de Jesús y su mensaje. En un mundo donde las adaptaciones religiosas suelen polarizar audiencias, Jenkins reafirma que su serie busca tender puentes entre la historia y la espiritualidad contemporánea, recordando que el arte y la fe pueden coexistir de manera creativa y significativa.