La posibilidad de una precuela de Rambo ha encendido el debate no solo sobre la continuidad de una saga icónica, sino también sobre el papel de la Inteligencia Artificial (IA) en el futuro de Hollywood. Sylvester Stallone, el alma de John Rambo, sorprendió al proponer que una historia de origen, ambientada en su juventud, debería ser protagonizada por él mismo, utilizando la tecnología de rejuvenecimiento digital para hacerlo lucir como un soldado de 18 años. Sin embargo, esta ambiciosa idea ha sido recibida con escepticismo por Jalmari Helander, el cineasta finlandés a cargo de dirigir la nueva precuela. Helander, conocido por su preferencia por los efectos prácticos y el crudo realismo en películas de acción como Sisu, ha manifestado sus reservas, indicando que «no está seguro de que la tecnología esté lo suficientemente avanzada» para lograr una versión creíble de un joven Stallone sin caer en el temido ‘valle inquietante’ del CGI. Esta postura subraya una división clave en la industria: ¿Debe la nostalgia priorizarse sobre la autenticidad y el realismo?
El Realismo de la Precuela se Opone a la Nostalgia Digital de Sylvester Stallone
La crítica de Helander no es solo una objeción técnica, sino un voto de confianza en una nueva dirección para la franquicia. El proyecto actual de la precuela, que explorará los años de John Rambo durante la Guerra de Vietnam con el actor Noah Centineo asumiendo el rol protagónico, representa un enfoque más tradicional para «refrescar» la saga. Al cuestionar la viabilidad del rejuvenecimiento con IA, el director apuesta por una cara fresca que pueda construir su propia interpretación del traumático origen del personaje, sin las ataduras del legado digital de Stallone. Mientras «Sly» defiende que «la IA es lo suficientemente sofisticada» para recrear a un Rambo juvenil paseando por Saigón, la productora y el nuevo director optan por evitar los riesgos del de-aging extremo. Esta divergencia de opiniones refleja una encrucijada tecnológica y creativa en el cine: el deseo de las estrellas de preservar sus papeles eternamente choca con la visión de cineastas que buscan mantener el realismo y la verosimilitud en pantalla, incluso al abordar la historia de un legendario héroe de acción.