En junio de 2025, las autoridades sanitarias de Alemania y Austria emitieron una alerta tras detectar un brote de salmonela vinculado al consumo de una crema de anacardos con sabor a frambuesa. El producto, listo para el consumo y distribuido en supermercados de ambos países, ha provocado 52 casos en Alemania —todos en niños menores de cinco años— y 13 en Austria, según el Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC). Al menos 24 niños han sido hospitalizados por complicaciones derivadas de la infección. La bacteria identificada, Salmonella Infantis, suele estar asociada al pollo contaminado, pero en este caso se encontró en un producto vegetal, lo que ha sorprendido a los expertos.

Más de 65 niños afectados y 24 hospitalizados por la bacteria Salmonella Infantis en productos distribuidos en Europa

El ECDC advierte que la crema fue también distribuida en otros países como Croacia, Hungría, Italia y Eslovaquia, aunque hasta ahora no se han reportado casos fuera de Alemania y Austria. Dada su larga vida útil, existe el riesgo de que aún esté presente en hogares europeos. Los síntomas incluyen diarrea, fiebre, vómitos y malestar general, siendo especialmente peligrosos para niños, ancianos y personas inmunodeprimidas. Las autoridades han retirado el producto del mercado y continúan investigando su origen para evitar nuevos contagios. Este brote subraya la importancia de la trazabilidad alimentaria y la vigilancia sanitaria en productos no tradicionales.