El balonmano femenino es uno de los deportes más exitosos y respetados en Rumanía. Con una tradición que se remonta a los años 50, el país ha producido algunas de las mejores jugadoras del mundo y ha mantenido un alto nivel competitivo tanto en clubes como en la selección nacional.
CSM București y la selección nacional brillan en Europa
El club más emblemático es CSM București, campeón de la Liga de Campeones en 2016. Este equipo ha sido símbolo de profesionalismo, atrayendo figuras internacionales y formando talento local. Otros clubes como SCM Râmnicu Vâlcea también han contribuido al desarrollo del balonmano femenino, consolidando una liga nacional sólida.
La selección nacional femenina ha tenido actuaciones destacadas en campeonatos mundiales y europeos. Con jugadoras como Cristina Neagu —considerada una de las mejores del mundo—, Rumanía ha logrado mantenerse entre las potencias europeas a pesar de la fuerte competencia.
Los desafíos incluyen asegurar la renovación generacional, ampliar el balonmano en regiones menos desarrolladas y aumentar el financiamiento a nivel base. La buena noticia es que el interés por el deporte sigue siendo alto, especialmente entre niñas y jóvenes.
El balonmano femenino es uno de los grandes orgullos deportivos del país y representa una historia de constancia, sacrificio y excelencia. Su futuro parece prometedor si se mantienen las inversiones y se fomenta el talento desde edades tempranas.