En 2020, el artista senegalés-estadounidense Akon anunció la creación de Akon City, una ciudad futurista en Senegal inspirada en Wakanda, con un presupuesto estimado de 6.000 millones de dólares. El plan incluía rascacielos ecológicos, hospitales, universidades, parques acuáticos y una criptomoneda propia llamada Akoin. Ubicada en Mbodiène, a 100 km de Dakar, la ciudad prometía ser un símbolo de innovación africana, autosuficiencia energética y desarrollo tecnológico. Sin embargo, tras colocar la primera piedra, el proyecto enfrentó múltiples obstáculos: conflictos de propiedad de tierras, problemas legales con la criptomoneda y una falta crítica de avances en la construcción.
El ambicioso proyecto del cantante Akon inspirado en Wakanda fue cancelado tras años de retrasos y falta de fondos
En 2025, el gobierno de Senegal canceló oficialmente Akon City, recuperando el 90% de los terrenos cedidos y anunciando un nuevo proyecto turístico más realista. Solo quedaron en pie un centro juvenil, una cancha de baloncesto y un edificio de recepción sin terminar. Akon admitió públicamente errores en la gestión y asumió la responsabilidad del fracaso. Aunque el sueño de una Wakanda africana quedó archivado, el artista continúa colaborando con el gobierno en iniciativas más modestas. La historia de Akon City se convirtió en un ejemplo de cómo la visión sin ejecución puede desvanecerse, incluso con fama y buenas intenciones.