Cuando en 1993 Electronic Arts lanzó el primer FIFA International Soccer, jamás imaginó que su propuesta no solo revolucionaría los videojuegos deportivos, sino que también daría lugar a anécdotas insólitas que hoy forman parte de la cultura gamer. Entre las curiosidades más recordadas se encuentra el hecho de que, en aquel título pionero, los jugadores podían escapar del árbitro corriendo por el campo para evitar una tarjeta roja. Esta mecánica, que en su momento parecía una simple falla del sistema, se convirtió en un fenómeno popular entre los usuarios, quienes disfrutaban tanto del bug como de los partidos en sí.
El curioso truco que marcó la historia temprana de los videojuegos de fútbol
Lo que comenzó como un error de programación se transformó en un detalle icónico, recordado con nostalgia por quienes vivieron los inicios de la saga. El árbitro, que aparecía en pantalla para amonestar a los futbolistas tras una falta, quedaba desorientado si el jugador corría lo suficientemente rápido, lo que impedía la aplicación del castigo. Esto generó un sinfín de estrategias improvisadas entre amigos, que competían por ver quién lograba burlar mejor a la autoridad en el juego. Lejos de ser una mancha en la reputación del título, este detalle fortaleció la conexión de los gamers con FIFA, al dotarlo de un toque de humor y espontaneidad que hoy es legendario.
Con el paso de los años, FIFA evolucionó hacia una simulación cada vez más realista, eliminando errores de este tipo e integrando tecnologías de punta como la captura de movimiento y la inteligencia artificial avanzada. Sin embargo, para muchos fanáticos, aquellas primeras ediciones siguen siendo joyas irrepetibles, donde la diversión estaba en los pequeños detalles y en los fallos que se convertían en parte del encanto. Escapar del árbitro para evitar la tarjeta roja no solo es una anécdota graciosa, sino un recordatorio de cómo los videojuegos, incluso con sus limitaciones técnicas, lograban construir experiencias únicas que hoy forman parte de la historia de la industria.